A mis mañanas de lectura cotidiana les faltara el aderezo… murió German Dehesa y con el Gaceta del Ángel.
Desde el día en que descubrí mi vocación y decidí emprender el espinoso y fangoso camino rumbo al desarrollo de la misma, es mi ritual matutino leer los diarios impresos y digitales locales y nacionales. Dúrate una década he sido torturado sin piedad por las malas nuevas de cada día, pero siempre había encontrado una válvula de escape a la inmundicia en “Gaceta del Ángel”.
Sin más palabras. Buen viaje German
Y aquí estoy, en mi casa de piedra y flores (claro, la casa de todos ustedes) enterándome de que Felipe Calderón sigue empecinado en su absurda y fallida guerra contra el crimen organizado, y digo fallida por que los resultados están a la vista de todos. Son escalofriantes. 30 mil muertos degollados hablan por sí solos.
Pero ante semejante desolladero, de visita en Mexico el “zar antidrogas” de EU, Gil Kerlikowske, reconoció el compromiso del presidente Felipe Calderón y su gobierno con la seguridad y legalidad en el país, especialmente su esfuerzo en el combate frontal a la delincuencia organizada y se pronunció por la no legalización de la marihuana en nuestro país. Y la pregunta que me hago es ¿a quien le importa las blasfemias de este pe…rico azul y rojo?
En que beneficia al pueblo de México en los hechos, el que un norteamericano reconozca a Calderón Hinojosa disque por su compromiso con la seguridad. Pero seguridad ¿de quién? A caso de nuestros migrantes agredido y muertos por rancheros Texanos. NO. Lo que el norteamericano está reconociendo es que a costa de la sangre de nuestra gente, Felipe Calderón le está tratando de contener el mercado de consumo que tiene Estados Unidos. Si, el mercado de consumo de drogas más grande del mundo.
Vera usted, en este sentido soy decididamente partidario de la legalización de las drogas en México. Para quien esto escribe, el consumo de drogas es similar al de alcohol y tabaco en cualquier parte del mundo. Responsabilidad propia y nada más. Decía mi abuela: el que por su gusto muere hasta sabroso le sabe.
Por ejemplo: el lunes se me dio irme de copas con un amigo. Bebimos unas cervecitas, luego unos mezcales y rematamos con unos etiqueta roja (que barbaridad) me pude haber ahogado o reventado el hígado. Y acaso de este hecho ¿es responsable el cantinero, el dueño de la cervecera o Johnnie Walker? (que este donde este GRACIAS por su bebida) claro que no. El responsable fui yo y nadie más que yo.
Un día fui también alumno de secundaria, preparatoriano y universitario, sé que los primeros acercamientos con estupefacientes se dan en los planteles educativos. Pero me parece desproporcionado el hecho de afirmar que los amigos inducen o que los menudistas de la droga obligan a consumirla. Lo digo porque tuve amigos que en segundo de secundaria ya les gustaba elevarse (como ellos dicen) y para ello recurrían a un sujeto tatuado y vestido de cholo que llegaba todos los días a la hora del receso hasta la puerta de la secundaria técnica 38 de mi terruño.
Por su puesto que mis amigos me invitaron a elevarme con ellos, y el Cholo me abordo un día y me ofreció la muestra, pero la fuerza de voluntad es todo y dije, no. Tres ocasiones insistieron y se mofaron de mi reservada conducta. Hasta ahí.
Es por eso que llego a considerar que a nuestros gobernantes les faltan esas dos cosa que Don Adolfo Ruiz Cortines considero fundamentales para bien gobernar: sesos y huevos. Se ahogan en un vaso de agua, se empeñan en darle vueltas redondas a un cuadrado, en pocas palabras se hacen pen… dencieros entre ellos. Y en el colmo de lo absurdo, se elogian entre sí por cualidades y virtudes que solo ellos se encuentran.
Alto al derramamiento de sangre. Legalizar las drogas y asumir cada uno nuestra responsabilidad es la solución. Cadena perpetua para secuestradores y violadores. Ley a secas, pues. Continuaremos.
